Minería chilena: visionaria y proactiva
En su edición de marzo, Revista Minería Chilena publicó este artículo escrito por Sara Reyes – Trade Commissioner para Chile, Perú y Bolivia- en el que aborda uno de los aspectos más desafiantes para el sector minero: su sustentabilidad. Al igual que otras industrias, la minería también avanza en la circularidad, aplicando innovación en las distintas etapas de sus procesos.
Innovación para una minería circular
Por Sara Reyes, agregada comercial para Chile, Perú y Bolivia
La minería tiene desafíos muy importantes de cara al cumplimiento de los compromisos de Cop 26 y, a la luz de la velocidad con la que la industria se ha enfrentado a los cambios y retos de los últimos años, todo indica que seguirá respondiendo con excelencia.
En Chile, la minería está avanzando en la dirección correcta frente a los desafíos ambientales y sociales, de diversidad e inclusión y también los de la Revolución 4.0. Estas transformaciones, que se vieron aceleradas por la pandemia, hoy se expresan en la búsqueda e implementación activa de soluciones para abordar la forma en la que se produce, se comercializa, transporta y define el destino del mineral, aspirando a una mayor sostenibilidad a lo largo de toda la cadena.
Otro hecho destacable es que la minería en Chile ha sido visionaria y proactiva. Visionaria porque anticipó el papel central que tendrían estos aspectos ambientales y sociales. Y proactiva porque fueron pioneros en estas transformaciones y porque actuaron incluso antes de que la legislación avanzase en estas materias.
Hoy, la necesaria transformación de la matriz energética, así como los cambios que debe experimentar para contribuir a la reducción de las emisiones, ponen de nuevo a la minería en un lugar central.
A todo ello, se agrega la necesidad de convertir todas las industrias en economía circular. La minería no escapa a esta obligación. En el ámbito de la producción, las ventajas propias de Chile en la generación de Energías Renovables han permitido una transición energética veloz, de hecho, se estima que en 2023 entre el 45% y 50% de la energía que utiliza el sector minero provenga de fuentes renovables. En cuanto al agua, otro factor crítico para la minería y para el medioambiente, progresivamente se incorpora el uso de agua de mar y Cochilco proyecta que, en 2031, el 47% de los recursos hídricos de la minería serán de esta fuente. También se conocen avances en el uso de transporte eléctrico, en la reutilización de neumáticos y en el aprovechamiento de relaves.
Para todo ello, la innovación es clave. Solo las soluciones que integren innovación tecnológica podrán responder a las necesidades de la industria. Es necesario revisar todos los procesos para detectar las oportunidades de mejora que se traduzcan operaciones sostenibles, eficientes y especialmente seguras para las personas y el entorno.
Ser innovadores es parte de la identidad y el carácter nacional de Nueva Zelandia. El ingenio ha sido producto de nuestro posicionamiento geográfico, que al igual que a Chile nos ha planteado desafíos adicionales. La experiencia acumulada de innovación en distintas industrias y a través de toda la cadena de valor es un espacio de colaboración abierto, en el que hay otro aspecto en común: las tecnologías desarrolladas en Nueva Zelanda están centradas en el ser humano.
Progresivamente las industrias están siendo valoradas no solo en función de su aporte económico, sino también por su desempeño social y ambiental. La minería, por su importancia para el desarrollo de Chile, debe convertirse en un modelo que aproveche e impulse la tecnología para alcanzar la circularidad.

